No vamos al gimnasio, pero en Iba Andando también nos machacamos para estar en forma. Afortunadamente pasamos de «ciclarnos». Preferimos ponernos a tono a base de horas y horas de entrenamiento. Lo cierto es que no nos queda más remedio. Si queremos sonar con un mínimo aceptable de calidad, tenemos que ensayar más que nunca. Por eso las dos últimas semanas han sido un poco infernales. Tres ensayos la semana pasada, y otros tres ésta. En el último estuvimos cuatro horas seguidas trabajando con las canciones… Para ser honestos, estamos hasta los mismísimos de tanto ensayo. Además lo hacemos a horas intempestivas, terminando siempre la sesión de madrugada, lo que acentúa todavía más la sensación de agotamiento. Al principio estábamos un poco desesperad@s porque las cosas no salían adelante, pero después de estas dos semanas, la verdad es que comenzamos a atisbar una luz, a veces intermitente, pero que nunca se apaga. Estamos encontrando el camino, y hasta que no lo alcancemos no vamos a parar.
La semana que viene será también bastante dura, y la siguiente todavía más, pues tenemos que compatibilizar los ensayos de Iba Andando para preparar el concierto del día 15 de mayo en Tarragona, con algún que otro ensayo con MoonFlower, que toca el día 12 en La Caverna. En fin, una cosa de locos.
La sobredosis musical la hemos completado con el siguiente menú de conciertos:
Lunes: Rauelsson + Laura Gibson
Jueves: Vicente Prats + Conecta 4 + Carolina Otero
Viernes: Tórtel + Jonston
Sábado: Festival SOS
Para la semana que viene el menú incluye (además de los tres ensayos):
Lunes: Posies en Castellón
Viernes. Radar en Matisse
Entre tanto ensayo van surgiendo canciones nuevas y bastantes ralladas mentales. Ojalá tanto esfuerzo valga la pena.
Iba Andando 