Motivados

Qué gusto da ensayar con el local impecable. Ni Don Limpio nos lo hubiera dejado tan reluciente. Ahora, hasta da rabia pisar la moqueta. El próximo objetivo es una entrevista más acústico para Ràdio Nou, allá a finales de junio, precisamente el Día de la Música, 21 de junio para más señas. La entrevista por supuesto que no se prepara. Sale lo que sale en el momento y nos puede pasar como en nuestra visita a Localia TV, que a Nico le preguntaron cuando no se lo esperaba y comenzó a enrollarse como buen argentino hasta que salió del apuro.

En cuanto al acústico, estamos mirando que tres canciones pueden quedar mejor, aunque todo indica que serán Hasta el Infinito…, Perseguido y Buena suerte. Las prepararemos a conciencia.

Y nada, en las próximas semanas a disfrutar de los ensayos, a preparar el verano, a estudiar un poco (en el caso de Carmi) y en definitiva, a pasarlo bien. Y eso que de momento no vamos a ningún macro festival, que nos íbamos al Contempopranea y al final no podemos por otros compromisos familiares.

Una última cosa: muchísimas gracias a todos los programas de radio que están programando las canciones de «Mañana por  la mañana». Hay muy buena gente en las ondas.

Cuatro bolsas gigantes de basura

Hemos dejado atrás una de las mejores épocas en la corta historia de Iba Andando. El mejor momento diríamos. Un buen momento musical y personal para el grupo. Han sido unos meses en los que hemos disfrutado componiendo, grabando las canciones nuevas, tocándolas en directo y sobre todo, ha sido un gran momento de grupo. Los cuatro hemos pasado los mejores días juntos desde que esta historia se puso en marcha.

El futuro será diferente. Ya veremos si mejor o peor. No tenemos conciertos a la vista y hasta después del verano creemos que nada va a salir adelante. Hemos limpiado La Casa de Espinete, que hacía ya mil años que estaba que daba pena. Se nos olvidó tirar las cuatro bolsas gigantes de basura que hemos acumulado estos meses (con latas de cerveza, papelorios, cuerdas de guitarra…), y el cabrón de Nixon, nuestro perro, las ha destrozado. Lo ha esparcido todo… Menos mal que ha sido fuera. Dentro, en La Casa de Espinete, todo está ordenado y limpio. Da incluso rollo verlo todo tan guay.

Hoy hemos vuelto a los ensayos después de una semana off. Había pocas motivaciones y ha sido un poco aburrido-triste. A ver si en los próximos días arrancamos el motor de Iba Andando.

El rollo folky que no nos sale

Llevamos unos días de ensayos que son la hostia. Que nos perdonen la expresión, pero nunca lo habíamos pasado tan bien en los ensayos. Antes, a las diez de la noche todo eran caras largas y más o menos una obligación. Ahora, además de eso, conseguimos convertirlo en un momento divertido del día. Nos sirve para abstraernos de todo y disfrutar con las canciones. Tiene mucho que ver que en el Matisse la liáramos bien. Nos dio mucha confianza. Por ahí, como diría Nico, ha habido dificultades gordas, pero también hemos sido capaces de dejarlas de lado y seguir con nuestro rollo.

Y hablando de rollos. Llevamos también unos días tratando de sacar una canción con un rollo muy folk, muy de «iejaaaa!!!», pero como no estamos acostumbrados al asunto y no desemboca ningún día en nada memorable. La cosa es así: Carmina con la armónica, Josep con la guitarra acúsitica a toda leche, Nico dándole mamporrazos a la caja (le sobra el resto de la batería) y Vins buscando colocar sus arpegios por alguna parte. ¿Saldrá algo? La verdad es que molaría.

En los próximos meses…

«¿Estáis tocando mucho, no?»

Esta es nuestra teoría sobre los directos: Lo primero que debe hacer un grupo es tocar. Y si es posible mucho. Al menos al principio, porque entre otras cosas, es la mejor manera que conocemos de promocionarse y, sobre todo, perfeccionarse. Porque tocar en directo es al principio muy jodido para cualquier grupo novel. Templar los nervios, afinar, acertar en las notas, no acelerarse… e incluso disfrutar y tener actitud. Todo eso se consigue a base de directos. Nos parece perfecto un grupo toque cien veces al año, si puede claro.

Ahora bien, cuando llevas un tiempo, creemos que lo mejor es dosificar los directos, al menos en la ciudad donde vives. Porque es muy difícil que los amigos vayan a verte una vez al mes, no nos engañemos, y tampoco es cuestión de quemar a tu público potencial. Tocar fuera no hay ningún problema, ojalá pudiéramos tocar todas las semanas, pero lamentablemente ni nos llaman ni las puertas se abren. Se hace lo que se puede.

Todo esto viene porque en realidad Iba Andando hace unos meses que ya no toca tanto y en el futuro no creemos que lo haga mucho. Cinco conciertos en cinco meses será el balance hasta mayo. De ellos sólo uno en Valencia. El año pasado por estas fechas llevábamos justo el doble. Por lo que es evidente que el grupo está aplicando su nueva filosofía. La idea es tocar dos-tres veces en Valencia al año, y salir fuera todo lo que podamos, pero claro, ya os hemos explicado que lo de conquistar nuevos territorios está muy complicado. Todo esto luego es relativo, porque si alguien viene con miles de dólares sucios en sus bolsillos y nos propone tocar en su bar todos los días, nos dudaremos en entregar nuestros cuerpos a la causa…

En los próximos meses además la cosa de tocar anda jodía. Entre cuestiones de estudios, de curro y demás, en junio haremos una miniactuación acústica en la radio, en julio no tenemos nada de momento, en agosto no podemos y a partir de septiembre ya veremos. O sea, que conciertos de escenario, ni uno. Se presenta un verano largo y a veces hasta asusta no tener nada en la agenda, pero bueno, seguro que saldrá algo. Y si no, nos lo inventaremos.

Orgullo y satisfacción

Decíamos en la crónica del concierto del Matisse, que nos daba la sensación de que algo había cambiado en este grupo. Por fin para bien. El otro día coincidimos por ahí con varios amigos que estuvieron en el concierto y no pararon de felicitarnos, algo que nos ruboriza y al mismo tiempo nos llena de orgullo y satisfacción, que diría nuestro apoltronado monarca.

Después de nuestro pequeño éxito compartido (grande en nuestros corazones), regresamos a los ensayos con otro aire. Es difícil de explicar, pero creo que nunca había habido tan bien ambiente en La Casa de Espinete. Era sábado tarde, y lo cierto es que los sábados no tienen nada que ver con los ensayos entre semana, siempre a horas intempestivas y cansados de largas jornadas de trabajo. Ahora vienen dos semanas de ensayos de madrugada, así que ya os contaremos si seguimos tan cariñosos.

Por fin ha llegado el nuevo EP. Ya está a la venta y esas cosas. Con el celofán parace como las bolsas de comida deshidratadas y no luce nada, pero cuando le quitas el plastiquito, se queda muy chulo. Ya veréis.

Hoy lo hemos vuelto a escuchar enterito y uff, la verdad es que nos gusta mucho. Ha quedado muy bien.