Un tercio, por favor

Tras unos días de descanso, ayer volvimos a la Casa de Espinete. Entramos con cierto temor y salimos satisfechos, aunque conscientes de que tenemos mucho trabajo por delante. Aparcado el tema del acústico, era la hora de ponerse a trabajar en formato trío y en eléctrico.

Hemos comenzado por averiguar qué canciones de nuestro actual repertorio se pueden salvar tocando sólo tres componentes sin echar de menos ciertos sonidos. La verdad es que la cosa fue como esperábamos, es decir, hay canciones que difícilmente las volveremos a tocar en directo como trío, ya que al perder una guitarra dicen muy poco. Lo fácil sería descartarlas a las primeras de cambio, pero ayer, en una especie de arrebato de orgullo, decidimos exprimirnos hasta agotar todas las posibilidades de una de ellas. Tras cinco horas de ensayo al final dimos con la solución. Tenemos que darle la vuelta a muchos temas para hacerlos sonar bien. Mucho trabajo por delante, es cierto, para también trabajo que nos estimula y justifica todas las horas que le metemos al ensayo.

Todo indica que el que más trabajo tiene por delante es Josep. Apoltronado con sus cuatro acordes de siempre, ahora tendrá que exprimirse y demostrar que sabe tocar la guitarra mínimamente. Ya no le valen los «solillos unitónicos», así que a trabajar tocar… Aunque Nico y María tampoco se quedan muy atrás, a ellos también les toca un 33 por ciento del nuevo sonido de Iba Andado. Esta nueva etapa nos ilusiona.